Durante el Verano de 1983 un ciudadano de Alexandria, Virginia, llamado Larry Bryant presentó una denuncia contra el Departamento de Defensa de Estados Unidos, las Fuerzas Aéreas, El Ejército, La Agencia de Seguridad Nacional y el FBI por ocultar el accidente aéreo de Roswell en 1947 y por ocultar la evidencia del vehículo extraterrestre y los cuerpos de los ocupantes de la Nave.
Un documento del FBI añadido a la orden ante el tribunal citaba a un investigador de las Fuerzas aéreas que afirmaba que habían recuperado 3 naves espaciales en forma de platillo de unos quinces metros de diámetro y que habían caído cerca al radar de Nuevo México, el investigador aseguraba que el radar interfirió en los sistemas de los platillos provocando el accidente de las naves que iban ocupadas por humanoides de un metro de estatura y con trajes metálicos.
Bryant en su denuncia exigía que fueran liberados los extraterrestres que consideraba que aún se encontraban vivos y que eran retenidos en contra de sus derechos constitucionales al estar detenidos sin cometer delito alguno. Bryant esperaba que el gobierno los liberara o que al menos dieran los cuerpos muertos de los extraterrestres a las autoridades civiles.
Muchos dicen que Bryant solo buscaba generar un escándalo publico ya que consideraban imposible que el gobierno aceptara la existencia de naves y de vida extraterrestre después de tantos esfuerzos por negarlos, además de que argumentaban que una simple denuncia no podría cambiar esta posición del gobierno, lamentablemente para los seguidos del misterio fue así, el gobierno siguió en silencio y el proceso quedó sepultado por la historia.
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